Carlo Maratti – Martirio de Santa

DIT 117
Martirio de Santa (reverso otro estudio)
Carlo Maratti
Pluma y aguada gris sobre papel
22,5 x 17,8 cm
Verjurado grueso, puntizones verticales a 26 mm
Firmado. Filigrana de dos círculos concéntricos en estrella de 6 puntas.
XVII

Carlo Maratti (Camerano, 13 de mayo de 1625 – Roma, 15 de diciembre de 1713) fue un pintor italiano del «alto barroco» (barroco final). Así trabajó el dibujo y la pintura principalmente en Roma en la Escuela Italiana del Siglo XVII.

Se le considera una figura clave de la segunda mitad del siglo XVII con una pintura de estilo sobrio y mesurado. De este modo su estilo era opuesto al barroco decorativo de Pietro da Cortona y Luca Giordano.

Desde niño mostró gran facilidad para el dibujo, y a los once años de edad viajó a Roma. Ingresó como aprendiz en el estudio de Andrea Sacchi, donde permanecería durante 22 años y del que fué gran amigo como testimonia el retrato que Maratta hizo de su maestro (Madrid, Museo del Prado). Andrea orientó a Maratta hacia el estudio de Rafael Sanzio, Correggio y Annibale Carracci, influencias que Maratta fusionaría con otras de la escuela veneciana.

Más tarde el papa Alejandro VII le encargaría pinturas para iglesias romanas y para la catedral de Siena. De la Huida a Egipto, conservada en esta última, existe una réplica de formato reducido en el Museo del Prado.  Maratta ingreso en la Accademia di San Luca de Roma en 1662. Trabajó al servicio de los papas Inocencio XII y Clemente IX, a quien retrató (1669) copiando el esquema del Inocencio X pintado por Velázquez.

También se le encomendó la restauración de los frescos de las Estancias de Rafael. Pintó en 1686 una famosa Asunción de la Virgen para Santa María del Popolo en Roma. Su labor como fresquista incluye ciclos decorativos en Frascati (la Villa Falconieri) y en Roma (el Palacio Altieri). De igual manera entre sus retratos, muy estimados, se puede mencionar el de André Le Nôtre, diseñador de los jardines de Versalles (h. 1679; Palacio de Versalles).

Pero el grueso de su producción es pintura religiosa. De ello es ejemplo la Virgen dando de mamar al Niño de la Casa de Alba (Madrid, Palacio de Liria). Así una de sus obras más importantes es una pintura de Constantino destruyendo los ídolos para el Baptisterio de Letrán. Esta obra incrementó la fama de Maratta en la Santa Sede.

Su obra pictórica se singulariza por su aspecto sólido, sobrio y noble, contrapuesto al efectismo un tanto frívolo del barroco decorativo. Sin embargo, se achaca a Maratta su gusto excesivo por los detalles accesorios, y cierta debilidad en el tratamiento de los paños.

Maratta murió en Roma el 15 de diciembre de 1713. Poseedor de una buena colección de arte, en su mayoría comprada después por Felipe V de España e Isabel de Farnesio. Entre las piezas que atesoró, destacan pinturas de Giovanni Bellini, los Carracci, Guido Reni y de su maestro Sacchi.