Paolo Veronese – Estudio de escorzos de figuras

DIT 166
Estudio de escorzos de figuras
Paolo Veronese
Pluma y aguada parda sobre papel
97 x 245 mm
Verjurado
Firmado. Podríamos igualmente encontrarnos que éste trabajo, se conecta de manera oportuna a uno de los paneles que representan las almas purificadas hechas por Palma el Joven para la escuela de San Fantin, ubicada en el sestiere de San Marco, construido entre 1592 y 1600 en un proyecto de Antonio y Tommaso Contin y Alessandro Vittoria. En diciembre de 1600, Palma il Giovane concluyó una decoración muy importante para la sala en la planta baja que comprende 13 paneles de diferentes dimensiones donde se aborda el concepto teológico de Purgatorio y la expiación del pecado, entre cuyos motivos se encuentra la presente obra, por lo que no podemos descartar que su autor sea Palma El Joven.
XVI

Paolo Caliari o Cagliari (Verona, 1528 – Venecia, 1588), también conocido como Paolo Veronese (en España como El Veronés), fue un pintor italiano, figura central del Manierismo veneciano.

Hijo de un picapedrero, nació en Verona, ciudad de la que tomó su apelativo y donde se formó como pintor. En 1556 se estableció definitivamente en Venecia, donde desarrolló su arte, siendo una de las figuras más destacadas de la escuela veneciana. Desde 1541 fue discípulo y ayudante del también veronés Antonio Badile, con cuya hija Elena contrajo matrimonio. En 1555 o 1556 recibe en Venecia su primer encargo representativo: la decoración de la sacristía y los techos de la iglesia de San Sebastián. Allí crea un ciclo de pinturas con perspectiva «sotto in sù» (de abajo a arriba). En 1560 viaja a Roma para estudiar los techos de la Capilla Sixtina de Miguel Ángel, cuya influencia se deja notar en las obras posteriores, como los frescos de la Villa Barbaro, en Máser (principios de la década de 1560), que había sido diseñada por Andrea Palladio. Esta colaboración entre Veronés y Palladio influyó en las arquitecturas que se representan en sus cuadros posteriores. A principios de los años 1570, la familia Cuccina le encargó una serie de cuadros de gran formato sobre temas bíblicos: La Virgen y la familia Cuccina, la Adoración de los Reyes, Las bodas de Caná y el Camino del Calvario, en los que Veronés representa un estilo renovado, profundizando en el color e incrementándose el claroscuro. Los cuatro se encuentran en la Galería de Dresde y no ha de confundirse estas Las bodas de Caná con la versión anterior que del mismo tema se guarda en el Museo del Louvre. En 1573 recibió un encargo para pintar un gran lienzo con el tema de La Última Cena. El resultado del cuadro (ahora en la Galería de la Academia de Venecia) le llevó ante el tribunal de la Inquisición, al entenderse que Veronés pintaba el tema religioso con una excesiva libertad que rozaba la irreverencia pues representó a San Pablo repartiendo los alimentos. Veronés argumentó que había añadido personajes, animales y otros elementos en dicho cuadro por exigencias creativas. El artista resolvió el conflicto cambiándole el nombre al cuadro que pasó a denominarse Cena en Casa de Leví, un capítulo de importancia religiosa menor, con lo cual la Inquisición aceptó ciertas licencias. En parte por este conflicto con la Inquisición y de acuerdo a una religiosidad más emotiva, el pintor evolucionó en su vejez hacia una pintura de tipo más reflexivo, menos decorativo.

Bueno, pequeños orificios de Lepisma que no afectan a las zonas pintadas.
Colección particular florentina