Francisco de Goya – Función de mojiganga
Francisco de Goya – Función de mojiganga
Referencia: GR 339Título de la Obra: Función de mojiganga
Autor: Francisco de Goya
Técnica/soporte: | Aguafuerte y aguatinta sobre papel |
Medidas: | Huella 25 x 35, hoja 35 x 45 cm |
Tipo de papel: | Verjurado fuerte |
Filig./Datos: | 5ª edición , año 1927 |
Época: | 1927 |
Biografia: | Francisco de Goya y Lucientes (Fuendetodos, Zaragoza, 30 de marzo de 1746-Burdeos, Francia, 16 de abril de 1828) fue un pintor y grabador español. Su pintura clásica abarca la pintura de caballete y mural, el grabado y el dibujo. Desarrolló un estilo que inaugura el Romanticismo. Por tanto, el arte goyesco supone el comienzo de la pintura contemporánea y de las vanguardias pictóricas del siglo XX. Por todo ello, se le considera uno de los artistas españoles más relevantes y uno de los grandes maestros de la historia del arte. Viaja a Italia en 1770, donde traba contacto con el incipiente Neoclasicismo, que adopta cuando marcha a Madrid. Adquiere un estilo pintoresquismo costumbrista rococó de su trabajo como pintor para los tapices de la manufactura real de Santa Bárbara. Una grave enfermedad, que le aqueja en 1793, le lleva a acercarse a una pintura más creativa y original, expresando temáticas menos amables que los modelos que había pintado para la decoración de los palacios reales. Crea pintura en hojalata, a la que él mismo denominaba de capricho e invención, que inicia una fase ya madura de la obra del artista así como la transición hacia la estética romántica. Además, su obra de arte refleja el convulso periodo histórico en que vive, particularmente la Guerra de la Independencia. Crea Los desastres de la guerra que es casi un reportaje moderno de las atrocidades cometidas. Componen una visión exenta de heroísmo donde las víctimas son siempre los individuos de cualquier clase y condición. Gran popularidad tiene su Maja desnuda, favorecida por la polémica generada en torno a la identidad de la retratada. De comienzos del siglo XIX datan también otros retratos que emprenden el camino hacia el nuevo arte burgués. Al final del conflicto hispano-francés pinta dos grandes cuadros a propósito de los sucesos del levantamiento del dos de mayo de 1808. Sienta un precedente tanto estético como temático para el cuadro de historia, alcanzando no solo los sucesos próximos a la realidad que vive el artista, sino que alcanza un mensaje universal. Su obra culminante es la serie de pinturas al óleo sobre el muro seco con que decoró su casa de campo (la Quinta del Sordo), las Pinturas negras. En ellas Goya anticipa la pintura contemporánea y los variados movimientos de vanguardia que marcarían el siglo XX. |
Estado de conservación: | Bueno, mancha en parte superior izquierda |
Procedencia: | Colección particular madrileña |